La alcaldesa de Tomé, Ivonne Rivas, arriesga la suspensión de sus funciones por 4 meses tras negarse a repetir una votación para permitir el funcionamiento de la discoteque “Charly” de la comuna costera.

En una sesión convocada en junio de este año, el Concejo Municipal de Tomé rechazó la renovación de patente de alcoholes de la discoteque, lo que motivó la presentación de un recurso de protección en la Corte de Apelaciones penquista.

Esta acción judicial fue acogida a principios de septiembre, ordenándose una nueva votación del Concejo en un plazo máximo de 5 días para cumplir el fallo, según explicó el abogado Juan Sandoval, representante legal de la discoteque.

Sin embargo, la jefa comunal se habría negado, por lo que presentó una nueva acción que solicita la suspensión de las funciones de ésta por 4 meses.

Al respecto, Rivas señaló que se prohibió el ingreso de inspectores municipales para fiscalizar la discoteque, por lo que falta el oficio de la Dirección de Obras para acreditar que está en regla y así poder autorizar la patente.

Además sostuvo que mañana jueves analizará el caso en el Concejo Municipal.