Un positivo balance de sus años, tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados, hizo el saliente congresista Mariano Ruiz-Esquide. El parlamentario sostuvo que rechazar el Golpe Militar desde el primer día le hace sentir honrado, agregando que hay hechos de su vida que no repetiría pero que al verse al espejo puede saludarse gustosa y respetuosamente.
Agradeciendo a todos quienes expresaron respeto, cariño y preocupación por los complicados días que vivió tras una afección cardíaca, el octogenario senador presentó esta semana públicamente su apoyo a su colega y candidato Hossain Sabag por la Octava Cordillera, quien a su vez aplaudió la candidatura de su hijo Mariano Felipe a Consejero Regional.
El parlamentario demócrata cristiano sabe que en noviembre culmina una importante etapa de su vida y aunque asegura que ya vendrán los balances, señala que hizo lo que le fue posible agregando que le encantaría que ese fuera su epitafio.
Sobre su trabajo todos estos años, Ruiz-Esquide asegura que hay cosas por hacer porque no siempre es posible hacer todo. En ese sentido añadió que hay hechos de su vida que no volvería a repetir de ninguna manera, pero de todos modos también hay acciones que valora y que le permiten estar tranquilo consigo.
El parlamentario indicó que se debe tratar de hablar como se piensa y vivir como se habla y hasta ahora siente que lo ha logrado, agregando que sin duda habrán hechos que lo marquen y de los que se siente orgulloso.
Otra de las cosas que le hacen sentir orgullo y emoción, según el senador, es ver cómo su hijo Mariano Felipe aceptó el desafío del Consejo Regional añadiendo que cuando se vaya a Antuco, para su retiro, estará feliz y satisfecho de todo lo hecho en su vida.
