Desde julio el tribunal de alzada penquista programa cada lunes la vista del caso Randolph en una de sus seis salas. Sin embargo, por inhabilidad de los ministros o la suspensión solicitada por una de las partes, la causa sigue sin verse.

Eso preocupa a Catina Randolph, hermana de la víctima, quien ha luchado desde la reapertura del sumario a cargo del ministro en visita Carlos Aldana, por conocer lo que pasó a José en 1985.

El 26 de mayo de 1985 el estudiante de la Universidad de Concepción fue detenido tras participar en un accidente de tránsito. Randolph desapareció de una comisaría en Talcahuano, siendo sus restos encontrados en los roqueríos del sector Rocoto.

Como presuntos responsables del asesinato están encausados los carabineros en retiro Mauricio Vera Cortesi y Jaime Barría Sánchez, quienes habrían matado al joven por motivos que aún no han sido aclarados, pero que no tienen relación con temas políticos.

Es justamente con este último argumento que Vera y Barría solicitaron al ministro Aldana declararse incompetente en la causa, por no tratarse de un hecho de violación de derechos humanos. El magistrado rechazó la petición y el caso se fue a la Corte de Apelaciones.

Es ese recurso el que este lunes debería revisar el tribunal de alzada, esperando Catina Randolph que se rechace.

Tiene a su favor la hermana de José Randolph un informe de la fiscal judicial Miriam Barlaro, quien es de la opinión de que el caso, ya para sentencia, siga con el ministro Aldana debido a su carácter de violación de derechos humanos.