El presidente estadounidense Barack Obama pidió este martes a los países miembro de Naciones Unidas que adopten una enérgica resolución sobre Siria, cuyo aliado, Rusia, busca negociar la entrega de las armas químicas de Damasco.

En su discurso en Nueva York, Obama exigió “una resolución sólida del Consejo de Seguridad para verificar que el régimen de Al Asad respeta sus compromisos” y destruye su arsenal de armas químicas, tal como acordó con Rusia. “Si no podemos acordar siquiera eso, demostraremos que la ONU es incapaz de hacer respetar la más básica de las leyes internacionales”, afirmó.

“Estados Unidos está preparado para usar todos los elementos en nuestro poder, incluyendo la fuerza militar” para asegurar sus intereses en la región, advirtió, dejando la puerta abierta a una intervención en Siria, donde la guerra civil ha provocado 110.000 muertos en 30 meses.

Obama criticó a los que dudan de la responsabilidad de Damasco en los ataques con armas químicas del 21 de agosto, que según Washington causó unas 1.400 muertes y estuvo a punto de llevar a una intervención militar estadounidense.

Rusia admitió el martes que una resolución del Consejo de Seguridad sobre Siria puede “mencionar” el Capítulo VII de la Carta de Naciones Unidas, que permite duras sanciones o el uso de la fuerza, pero que ello no implicará el recurso automático a la fuerza.

“El Capítulo VII sólo puede ser mencionado como una de las medidas” a adoptar posteriormente, en caso de violación de los compromisos adquiridos o “si alguien, da igual quién, usa armas químicas”, declaró el viceministro de Exteriores Serguei Riabkov ante la Duma (cámara baja rusa).