El presidente ruso, Vladimir Putin, advirtió el lunes que una intervención militar en Siria sería una “agresión” que violaría el derecho internacional y desestabilizaría la situación en la región.

“Una intervención militar sería una grave violación del derecho internacional, una agresión según los términos de la Carta de la ONU”, declaró Putin al margen de la cumbre de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC), a orillas del mar Negro.

El presidente ruso saludó además el hecho de que los miembros del OTSC (Rusia, Armenia, Belarús, Kazajistán, Kirguistán y Tayikistán) aprobaron la decisión de Moscú de oponerse a una acción militar contra el régimen del presidente sirio Bashar al Asad.

“Los miembros del OTSC son unánimes: resolver la situación en Siria solo es posible a través de medios políticos y pacíficos”, declaró.