Si bien en nuestra sociedad, el grupo sanguíneo sólo es importante en ámbitos de salud, los japoneses nuevamente nos demuestran cuán distintas son nuestras culturas: si vives en ese país y tienes sangre de tipo B o AB, puedes perder tu trabajo y sufrir de bullying severo.

De hecho, un ejemplo de esto es que en 2012, el primer ministro del país nipón, Ryu Matsumoto, renunció tras un polémico conflicto con la policía. No obstante, en su discurso de despedida argumentó que sus “fallas” se debían a que era de sangre tipo B.

Pero, ¿por qué es tan importante el grupo sanguíneo en Japón? Esto se debe a una superstición histórica que se hizo fuerte en el siglo XX, cuando el Ejército Imperial formaba a sus soldados según este criterio.

Igualmente, alrededor de los ’70 el escritor Masahiko Nomi lanzó un libro al respecto, que es popular hasta la actualidad y que propició en estudio más formal del fenómeno. Esto pese a que los científicos han negado insistentemente que la sangre tenga algo que ver con la forma de ser de las personas.

Por otra parte, la traductora Chie Kobayashi afirmó que “ser parecidos se considera algo bueno en Japón”, ya que permite dividir a las personas en grupos dentro de una sociedad que es más bien homogénea.

Tan arraigada está esta creencia, que no sólo se publican horóscopos diarios según grupo sanguíneo, sino que existe toda clase de productos fabricados para cada tipo de sangre, desde chicles hasta condones.

El problema está en que no todos los grupos son considerados “buenos”, también están los “malos”. Dentro de esta última clasificación estarían los grupos B y AB, debido a que en la nación asiática representan entre ambos el 30% de la población, aproximadamente.

De esta forma, quienes poseen tipo A y O, correspondientes al 40% y 30% de los japoneses respectivamente, serían más aceptados socialmente, generándose discriminación al resto.

Según BBC, los rasgos de la personalidad que las personas poseerían de acuerdo a los grupos sanguíneos, basado en las creencias japonesas, serían las siguientes:

-Grupo A: serían perfeccionistas y excelentes para trabajar en equipo. Su defecto es que sufrirían de ansiedad.

-Grupo B: son considerados excéntricos, individualistas y egoístas.

-Grupo O: serían descritos como curiosos y generosos. Su defecto es que serían muy tercos.

-Grupo AB: serían más inclinados hacia las artes, aunque algo misteriosos y altamente impredecibles.