La lucha recuperó su condición de deporte olímpico, al imponerse este domingo sobre el béisbol/sóftbol y el squash, en una votación sin sorpresas del Comité Olímpico Internacional (COI), que sesiona en Buenos Aires.

La lucha recibió 49 votos favorables, frente a 24 que obtuvo el béisbol/sóftbol y 22 el squash, anunció el presidente del COI, Jacques Rogge, durante la 125 sesión del organismo deportivo, que el sábado eligió a Tokio como sede de los Juegos de 2020.

“Quiero agradecerles haber dado la oportunidad de salvar nuestro deporte. La lucha ha escuchado y ha aprendido”, dijo el presidente de la Federación Internacional de Luchas Asociadas (FILA), el serbio Nenad Lalovic.

Tras eliminarlo en febrero pasado del programa de los Juegos de 2020 y 2024, el COI decidió rescatar a este milenario deporte que en mayo se había ganado la posibilidad de volver a competir como deporte olímpico adicional, en competencia con el squash y el béisbol/softbol, que buscaba su regreso al olimpo tras quedar afuera para Rio de Janeiro-2016.

La lucha fue olímpica desde la primera edición de los Juegos de la era moderna en Atenas-1896 y también estará presente en Rio de Janeiro-2016 pero con esta decisión mantendrá su lugar en Tokio-2020 y en los Juegos de 2024.

Durante su presentación, la FILA destacó los cambios de reglamentos introducidos, el aumento de la participación de las mujeres y una renovación en la difusión para hacerlo más atractivo para el público joven, lo que se le había reclamado.

“Prometimos más mujeres y vamos a tener una vicepresidenta. Hicimos cambios en las reglas de competencia y los resultados son sorprendentes, hay más jovenes interesados en la lucha. FILA está revolucionada y hay una nueva lucha”, dijo Lalovic.

Lalovic aseguró luego en rueda de prensa que “la lucha ha cambiado y se ha convertido en un deporte modernizado, y logramos persuadir que nuestro deporte mejorado va a apoyar también al movimiento olímpico”.

Lalovic prometió que cambiará “toda la escenografía, la forma en que los atletas entran, la posición de los árbitros”, para hacer este deporte más atractivo también como espectáculo.

El COI optó por el deporte ancestral antes que por el béisbol y el sóftbol, que pretendían juntos regresar a la lucha olímpica tras quedar fuera para Londres-2012 y Rio-2016, o por el squash, sin historia en el olimpismo.

El béisbol intentó convencer de que la realización de torneos cortos de cinco días serviría para atraer a profesionales que no quieren perderse partidos de sus propias ligas, mientras que junto con el sóftbol ofrecían jugar en una sola sede para que resulte más económico.

Al squash no le alcanzó ser un deporte nuevo, con presencia en países sin peso deportivo y de bajo costo para los olímpicos con sólo 64 atletas, mitad hombres y mitad mujeres.

Tras la elección del deporte adicional al programa que cuenta con 25 disciplinas principales, el momento culminante de la sesión del COI será el martes cuando elija entre seis candidatos al sucesor de Jacques Rogge, su presidente desde hace 12 años, tras haber sido elegida Tokio como sede de los Juegos de 2020.

Tokio se impuso el sábado como sede de los Juegos de 2020 con 60 votos sobre Estambul, la otra ciudad finalista, que obtuvo 36, luego de que Madrid fuera eliminada en primera ronda, pese a haber llegado con el mejor puntaje y por tercera vez consecutiva a la instancia final.