“Somos lo que comemos”. La frase del conocido investigador Peter D’Adamo es una esperanza para muchas personas que anhelan llegar a su peso ideal, y se materializa en un procedimiento: la Dieta del Genotipo.
Ésta plantea que de acuerdo a las características fisiológicas, grupo sanguíneo, y la interacción de los genes de cada individuo con los alimentos, se puede establecer una dieta específica para cada persona. De esta forma se restringen ciertos nutrientes por no ser compatibles con el organismo.
Desde 2010 el procedimiento se ha vuelto muy popular en Chile, con interesados capaces de desembolsar entre 35 mil y 60 mil pesos en cada consulta. Además, las horas de muchos centros nutricionales del país que la prescriben están copadas hasta fin de año. Pero pese a que sus adherentes confían en los resultados, algunos especialistas advierten de los peligros que ésta puede traer a la salud.
¿A qué genotipo pertenece cada persona?
Este método clasifica a las personas en 6 grupos: recolector, guerrero, cazador, nómada, maestro y explorador.
Para cada uno de éstos se elabora un sistema de alimentación que considera ciertos nutrientes y restringe otros que no serían compatible con el grupo sanguíneo. ¿Por qué? Simplemente porque no se digieren con facilidad en su organismo. (Ver información de cada grupo aquí)
Por ejemplo, el genotipo “cazador” debe eliminar de su dieta los lácteos. La explicación está en que los “cazadores” poseen un sistema inmune muy reactivo al ambiente, por lo que estos alimentos estimulan la secreción de mucosidad en las vías respiratorias, lo que genera que luego se obstruyan.
En el caso del genotipo “guerrero” las personas tienen que eliminar el consumo de carnes rojas y blanca, excepto el pescado. Su alimentación debe estar basada en una dieta vegetariana y privilegiar las legumbres. Lo anterior, debido a que pese a presentar un buen estado nutricional, poseen un metabolismo ahorrativo. Esto lleva a que no pierdan peso con facilidad y presenten resistencia a la insulina.
El genotipo está determinado por distintas instituciones nutricionales en la primera consulta. Aquí se realizan medidas corporales, se determina el grupo sanguíneo y los pacientes son sometidos a un test de sabores amargos para elegir los alimentos, según publica la cadena de centros de nutrición Red Nutrición.
En base a este análisis un profesional elabora una dieta que considera las comidas prohibidas y permitidas, además de la frecuencia y las porciones que deben ser consumidas.
Reflexiones de los especialistas respecto a la restricción de ciertos alimentos
Pese a su popularidad, estas recomendaciones son muy criticadas por algunos especialistas. Uno de ellos es el nutriólogo de la Pontificia Universidad Católica, Cristián Maiz. En 2012 declaró en Red Salud UC que “No existen publicaciones científicas que sustenten la indicación de la dieta del genotipo y tampoco hay resultados que hayan demostrado su efectividad a largo plazo”
Los riesgos para la salud que pueden provocar la carencia de ciertos nutrientes es una preocupación para la nutricionista Carla Guzmán, docente de la Universidad San Sebastián. La restricción de ciertos alimentos podrán cumplir el objetivo de perder peso, pero también significar una carencia nutricional. “Quienes la prescriben deben ser muy responsables porque aún falta evidencia científica que la respalde”.
Respecto a este tema, la nutricionista de la Universidad de Concepción, Montserrat Victoriano, doctora en Nutrición de AgroParisTech, explicó a BioBioChile que el éxito de la dieta del Genotipo está dado porque elimina alimentos obesogénicos que producen el sobrepeso.
Agregó que no es peligrosa si se hace bajo supervisión profesional y se ingieren ciertos nutrientes -como las proteínas vegetales- para suplir la falta de otros (en este caso las proteínas). Sin embargo, no coincide con el planteamiento del Dr. Peter D’Adamo respecto de que si las personas consumen alimentos que no pertenecen a su genotipo arriesgan contraer enfermedades. Explicó que el grupo sanguíneo no es el único factor determinante en estos casos.
¿Puede cualquier persona someterse a esta dieta?
“Es muy importante que los pacientes con sobrepeso u obesidad cuenten con un equipo multidisciplinario para bajar de peso, cualquiera sea el método elegido”, explicó Carla Guzmán.
También enfatizó en la importancia de un “estilo de vida saludable” para mantener un peso ideal. Es decir, ingerir abundante agua, ingerir frutas y verduras son otras de las claves para lograr este objetivo.
Otra recomendación es que los adolescentes no sigan la dieta del genotipo. En opinión de la nutricionista Monserrat Victoriano, las personas deben aprender a alimentarse correctamente para siempre. Pero en muchos casos quienes se someten a este método sólo aprenden a no consumir ciertos grupos de alimentos restringidos, situación que en muchos casos no es viable en el tiempo.
