Preocupante cantidad de recursos económicos ha dejado de percibir el Hospital de Quellón por concepto de atenciones impagas acumuladas por años, es decir, deudas por atenciones brindadas sin ser canceladas oportunamente. Un buen número de pagarés se mantienen a la espera de ser regularizados.

Según lo señalado por Marisa Barría, funcionaria del área de recaudación de dicho recinto hospitalario, los montos adeudados corresponden principalmente a pacientes del sistema privado (isapres), quienes fueron atendidos en el hospital, por lo que firmaron transitoriamente un pagaré y comprometiéndose a volver y regularizar la situación.

Barría manifestó que, sin embargo, así como hay pacientes que mantienen deudas con el hospital, hay otros que responsablemente vuelven al día siguiente con los respectivos bonos adquiridos en su isapre, conscientes de que en el momento en que solicitaron atención ésta les fue brindada oportunamente y sin mayor trámite.

Marisa Barría indicó que, si bien la mayoría de la gente sabe cómo funciona el sistema, existe la mejor disposición de cada uno de los funcionarios para orientar a los usuarios respecto a los trámites que tengan que realizar.

Puntualizó que para aquellos pacientes que llegan a urgencia existe personal de recaudación trabajando las 24 horas. Dicho personal aguarda que éstos sean atendidos y sólo después, con su cédula de identidad, se verifica su condición particular a fin de determinar si deben cancelar o no por los servicios prestados.

Barría finalizó señalando que se espera que aquellas personas que mantienen deudas pendientes con el hospital puedan acercarse a regularizar su situación. Los recursos serán adecuadamente invertidos en poder adquirir los insumos y equipamiento necesario a fin de brindar cada día una mejor atención a la población de Quellón.