“Literatura infantil para el nuevo Chile: Recordando la colección Cuncuna de Editorial Quimantú” es el nombre de la charla a cargo del periodista y sociólogo Arturo Navarro Ceardi, creador de la Colección Cuncuna de la Editorial Quimantú, proyecto cultural del gobierno de la Unidad Popular y el presidente Salvador Allende. Esta charla forma parte del ciclo conmemorativo que el Centro Cultural Estación Mapocho junto al Instituto Nacional de Derechos Humanos, programaron en contexto de los 40 años del golpe de Estado, con el propósito de poner en valor la memoria como patrimonio para el Nunca Más. Miércoles 4 de septiembre, a las 19:00 horas, en la Sala Pedro Prado del Centro Cultural Estación Mapocho, entrada liberada.
Sobre Editorial Quimantú y Colección Cuncuna
Entre las iniciativas humanistas que caracterizaron la gestión del gobierno de la Unidad Popular y del presidente Salvador Allende, se cuenta la creación de la Empresa Editora Nacional Quimantú, que en mapudungun significa Sol del Saber. Sus colecciones de libros y revistas de bajo costo se vendían en quioscos y librerías con el propósito de satisfacer una amplia necesidad cultural: la de ofrecer lo mejor de la literatura chilena, latinoamericana y universal de todas las épocas a muy bajo costo, por tanto, al alcance de todas las personas. Con tirajes de 50.000 ejemplares, la editorial alcanzó a llegar a distintos y remotos lugares de la geografía chilena y distintos grupos humanos, cumpliéndose en el corto plazo, a fines de 1972, el desafío planteado por los directivos de Quimantú y la Unidad Popular: que en la mayoría de los quisocos del país se encontraban las publicaciones de esta editorial, hecho que no tiene precedentes en la historia editorial chilena.
La Colección Cuncuna, dedicada a niños en etapa pre-escolar, estuvo compuesta por dos series: Cuncuna Cuentos y Cuncuna Pintamonos. La primera presentó cuentos y poesías de autores nacionales como Marta Brunet, Floridor Pérez, Walter Garib entre otros; de autores internacionales como por ejemplo Oscar Wilde, Horacio Quiroga y los hermanos Grimm. Cada ejemplar estaba ilustrado por dibujantes como Guido, Nato, Hervi, Marta Carrasco, María Angélica Pizarro, Irene Domínguez y otros profesionales; y que contaba con un suplemento para adultos. La segunda, fue una serie de libros para que los niños colorearan.
Tras el golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973, Quimantú fue cerrada por las nuevas autoridades y sus dependencias fueron intervenidas por efectivos militares. Al año siguiente, y entendiendo la importancia de la labor de Quimantú, el régimen militar refundó sin éxito el sello editorial bajo el nombre de Editora Nacional Gabriela Mistral. Finalmente, casi una década después, se declaró la quiebra de la empresa y las maquinarias fueron rematadas.
Negrito Zambo
El negrito Sam boliviano
