Las pruebas avanzadas por Estados Unidos sobre la presunta implicación del régimen sirio en un ataque químico el pasado 21 de agosto no son más que mentiras, declaró la tarde de este viernes el ministerio sirio de Relaciones Exteriores.

“Lo que la administración estadounidense calificó de pruebas irrefutables no son más que antiguas historias emitidas por los terroristas (rebeldes) desde hace más de una semana, con todo lo que suponen de mentiras, de fabricaciones y de historias inventadas”, declaró el ministerio en un comunicado leído en la televisión oficial siria.

El ministerio de Relaciones Exteriores se mostró sorprendido por el hecho de que una superpotencia engañe a su opinión pública de esta forma tan ingenua y apoyándose en pruebas que no existen.

El ministerio se sorprendió también de que Estados Unidos base sus posiciones de guerra y de paz en lo que se emite en las redes sociales y las páginas en Internet, añade el comunicado.

Las cifras citadas el viernes por el secretario de Estado norteamericano, John Kerry sobre el número de víctimas en el presunto ataque químico atribuido a Damasco no son más que cifras ficticias entregadas por grupos armados en Siria y por la oposición en el extranjero, añadió el ministerio sirio de Relaciones Exteriores.