La aventura de una pareja de astronautas obligada a luchar por la supervivencia en un mundo sin gravedad, protagonizada por Sandra Bullock y George Clooney en “Gravedad”, del mexicano Alfonso Cuarón, inauguró el miércoles la 70ª edición del Festival de Cine de Venecia, que este año presenta un programa marcado por la austeridad.

Aplaudida por la prensa especializada en su primer pase, el ‘thriller’ espacial, con eficaces efectos especiales en 3D, narra la dramática aventura de dos astronautas a la deriva en el espacio.

“Cuando decidí narrar la historia ambientada en el espacio, el espacio adquirió un valor metafísico”, aseguró Cuarón, quien logra seducir al espectador combinando suspenso con reflexiones, vacío con vida, espacio con tierra, muerte y resistencia, basura espacial con lágrimas, ironía y autoironía.

“Quise explorar el tema de la adversidad, algo que atañe a todos. A veces las adversidades no duran, a veces pasamos largas temporadas sumergidas en ellas. Quería llegar a contar cómo las consecuencias de las adversidades nos dan la posibilidad de renacer. Parte de eso pasa por aceptar la muerte”, sostiene el cineasta mexicano, coautor del guión junto con su hijo Jonás.

El célebre director de cine latinoamericano, entre los más mimados por Hollywood, vuelve a dirigir una película después de varios años, tras “Hijos del hombre”, de 2005.

La nueva película, presentada fuera de concurso, costó 80 millones de dólares y fue producida por el estadounidense David Heyman, el mismo de la serie de “Harry Potter”, con el que dirigió una entrega.

“Es una historia simple, pero que en el fondo tiene muchos significados”, explicó el realizador, que fue premiado en Venecia en 2001 por su divertido “Y tu mamá también” y está considerado uno de los directores más talentosos de su generación.

Para “Gravedad”, Cuarón sometió a los dos divos a un complejo trabajo físico, al obligarlos a trabajar solos, imitando la ausencia de gravedad, con una coreografía anómala y desconocida, colgados de cables a varios metros de altura o encerrados en cápsulas minúsculas en completa soledad.

“Fue un reto emocional y físico”, confesó Bullock, quien desembarcó en el legendario Lido veneciano acompañada por Clooney, los dos en gran forma física, despreocupados, dispuestos a bromear con la prensa.

“Bullock y yo hemos hecho mucho yoga juntos. Ella más que yo porque su papel era más difícil”, comenta con tono divertido Clooney.

Para el actor estadounidense, trabajar en una suerte de caja de luz en medio a la vastedad del espacio supuso sobre todo un desafío técnico.

“Había que evitar reaccionar de manera instintiva a la caída de objetos a alta velocidad, hablar velozmente y al mismo tiempo moverse lentamente, fue un trabajo extraordinario”, cuenta el actor, quien llegó a Venecia manejando su propia embarcación.

En busca de autores nuevos

La ausencia de divos, anunciada por el mismo director de la Mostra, Alberto Barbera, debido a “los elevadísimos costos de traer estrellas a Venecia”, ha obligado a los organizadores a buscar figuras nuevas en el panorama cinematográfico mundial.

“Descubrirán autores emergentes y extremados, decidí arriesgar”, advirtió Barbera, quien invitó de todos modos a Scarlett Johansson, protagonista de “Under the Skin”, de Jonathan Glazer, y a Nicolas Cage, presente en “Joe”, de David Gordon Green, quienes compiten en la sección oficial.

En total, 20 filmes disputarán el codiciado León de Oro, que será otorgado por un jurado presidido por el mítico cineasta italiano Bernardo Bertolucci.

Interrogado por la prensa, Bertolucci reconoció que buena parte del histórico prestigio del festival del Venecia, el más antiguo del mundo, reside justamente en su capacidad de indagar y de descubrir nuevos talentos.

Obligado desde hace unos años a moverse en silla de ruedas, el maestro del cine italiano confesó que presidir el jurado constituye para él un “trabajo agotador”, pero que de alguna manera es una tarea que debe a las nuevas generaciones, que se inspiran en el autor del “Ultimo tango en París” y “Novecento”.

El jueves comienza la competición con la proyección de las primeras películas seleccionadas: la italiana “Via Castellana Bandiera”, de Emma Dante, y “Track”, del australiano John Curran.

La sección Horizontes, la más experimental y novedosa de la Mostra, para la que han sido escogidos unos 17 filmes, se abrirá con “Algunas chicas”, del argentino Santiago Palavecino, y “La vida después”, del mexicano David Pablos, una película de bajo presupuesto realizada por estudiantes.

Como ocurre desde hace varios años, el cine español y latinoamericano no están representados en la sección oficial, ya que prefiere participar en otros certámenes internacionales.

El veterano autor de “El exorcista”, William Friedkin, recibirá también en una ceremonia solemne el León de Oro por el conjunto de su carrera.