Usuarias del Centro Terapéutico Carpe Diem de Concepción alertaron sobre el cierre del recinto, luego de que, presuntamente, se hayan constado irregularidades.

Una de ellas es Marcela Ocano, quien ingresó al sitio hace cuatro meses tras ocho años de consumo de drogas, con la intención de rehabilitarse.

Sin embargo, aún cuando le quedan varios meses para concluir el tratamiento de un año, la directora del recinto le avisó a ella, y a sus demás compañeras, del inminente cierre del hogar.

En la región del Bío Bío, Carpe Diem es el único centro de régimen cerrado que permite a las madres estar con sus hijos, situación que mantiene angustiadas a sus usuarias.

Y es que las principales afectadas solicitan terminar los tratamientos. De momento, ya les informaron que no se recibirán nuevas usuarias y que en septiembre se concretaría el cierre definitivo.

Las opciones que la Corporación les dio fueron recurrir a una residencial en otra región, trasladarse hasta el centro de Villamávida donde no podrían estar con sus hijos; o en último caso, ingresar a un centro ambulatorio… pero ninguna de estas opciones las convence.

Deisy Sandoval, agregó que todo partió con la toma que realizaron en abril pasado donde denunciaron irregularidades por parte de la directora anterior. Entre otras cosas, las obligaban a pedir comida en la Vega Monumental, aún cuando la Corporación recibe una subvención mensual de 600 mil pesos por usuaria.

A raíz de la toma se intensificaron las fiscalizaciones al recinto. Se cursaron infracciones, se sancionó y se reemplazó a la directora que encabezó las irregularidades, sostuvo el director regional de Senda, Jorge Bastías.

Pero igualmente el hecho podría desencadenar en el término del convenio financiero, agregó Bastías. Si bien hasta el momento no se ha puesto fin, es totalmente posible que ocurra en los próximos días, puntualizó el jefe regional de Senda.

Las mujeres insistieron en que es necesario reevaluar el cierre del recinto.