La Federación Nacional de Trabajadores de la Salud (Fenats) comenzó esta mañana un paro que se extenderá hasta este jueves, para manifestarse contra el déficit de recursos en los recintos públicos, dineros que generalmente recaen en el sector privado.

La paralización, que afecta a hospitales de las regiones de Tarapacá, Antofagasta, Valparaíso, Metropolitana, Bío Bío y la comuna de Rancagua, se ha llevado a cabo sin mayores inconvenientes y con atenciones normales.

Esto porque, según indica el presidente de la agrupación gremial, Óscar Riveros, los turnos éticos de los funcionarios se están cumpliendo como estaban programados, pese a la adhesión a la huelga de los 14 mil trabajadores afiliados a lo largo del país.

A pesar de lo anterior, el minsitro de Salud, Jaime Mañalich, se refirió a la jornada, diciendo desconocer la adhesión al paro y advirtiendo que si se deja de atender a la gente, hay personas que corren riesgos si deja de recibir atención oportuna.

Así, recalcó que el mandato ético obliga a los trabajadores a poner a los pacientes sobre otras prioridades.

Sobre la manifestación, Riveros indicó que “queremos que exista un debate de la salud pública, y lo que significa la asfixia que ha habido sistemática y permanentemente durante los últimos años porque se derivan recursos hacia la atención privada”.

El presidente de la Fenats agregó que “hoy en los hospitales nos encontramos con carencias de insumos, de personal, de especialistas, de tecnología, de infraestructura que da cuenta del estado en que se encuentra la salud pública. La ausencia de todo ello tiene que ver con los recursos que se les destinan a ésta (…) Una gran parte se va a la atención privada, con la compra de servicios a empresas externas”.

Sobre las acciones a tomar, el dirigente señaló que este miércoles realizarán mayormente asambleas, y que para mañana jueves están programadas marchas en todas las ciudades adheridas.