El joven opositor Sergio Massa fue el candidato más votado el domingo en la estratégica provincia de Buenos Aires, en las primarias argentinas del domingo con miras a las legislativas de octubre, aunque el oficialismo se mantenía como la mayoría a nivel nacional.

Las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO), una suerte de encuesta nacional, pueden marcar la tendencia de los comicios legislativos parciales del 27 de octubre, cuando se renovará la mitad de la Cámara de Diputados y un tercio del Senado.

Massa, de 41 años, un ex jefe de gabinete de la presidenta Cristina Fernández que se pasó a la oposición, suma el 34,7% de los votos en el distrito que tiene casi el 38% del padrón (11 millones de electores), en tanto el oficialista Martín Insaurralde reúne el 29,3%, escrutadas el 81,7% de las mesas.

Tras la tendencia oficial en su favor, Massa dijo haber dado “el primer paso hacia un gran frente político” para las legislativas de octubre.

“Somos la fuerza más votada en la provincia de Buenos Aires (la más poblada). Hemos dado el primer paso hacia un gran frente político”, dijo al proyectarse como dirigente nacional ante decenas de sus partidarios que celebraron haber obtenido más votos que los candidatos oficialistas de la presidenta Fernández.

La provincia de Buenos Aires, principal escenario político del país, concentra el 37,3% del padrón electoral y 35 bancas de diputados nacionales en juego.

Sin embargo, el Frente para la Victoria de Fernández (peronistas y centroizquierda) se mantenía como la fuerza con más votos a nivel nacional, con 5,4 millones de votos (26,0%), escrutadas el 90,3% de las mesas.

Ese caudal de sufragios le permitiría al oficialismo mantener la mayoría en la Cámara de Diputados, según proyecciones oficiales, pese a no ser la fuerza más votada en los principales distritos.

Ello se debe a que se renuevan las bancas de los legisladores elegidos en 2009, cuando el gobierno sufrió una dura derrota.

“Si bien esta es una elección preliminar que elige candidatos, estaríamos en condiciones de mantener y aumentar la representación del Frente para la Victoria (FPV) en el Parlamento”, dijo Fernández al hablar sobre la medianoche del domingo ante cientos de partidarios en el bunker del gobierno en un hotel céntrico.

En las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias se seleccionaron a los candidatos para las legislativas del 27 de octubre que renovarán la mitad de la Cámara de Diputados de 257 escaños y un tercio del Senado de 72 integrantes.

Ambas cámaras están controladas por el gobernante Frente para la Victoria (peronistas y aliados).

FERNÁNDEZ PIERDE EN LOS PRINCIPALES DISTRITOS

Distintas fuerzas de la oposición fueron las más votadas en los distritos de Córdoba (segundo mayor padrón), Santa Fe (tercero) y Capital Federal (cuarto).

Esos tres distritos, más la provincia de Buenos Aires, reúnen en conjunto 62,7% del padrón nacional, de 30,5 millones de electores, sobre 40 millones de habitantes en Argentina.

Massa, alcalde de la turística localidad de Tigre (30 km al norte), emergió como figura opositora centrando su campaña en la lucha contra la inseguridad, una de las mayores preocupaciones de los argentinos.

En la Capital Federal, el batacazo lo dio la alianza UNEN que desplazó la hegemonía del partido del alcalde Mauricio Macri, PRO (derecha), uno de los presidenciables para 2015, pese a que todas las encuestas le daban un triunfo amplio.

La fuerza UNEN (socialdemócratas, socialcristianos y centroizquierda), que dejó en tercera posición al oficialismo de Fernández, fue la única fuerza que realizó internas con la participación de tres listas en la capital argentina, el principal distrito político.

El oficialista Frente para la Victoria era derrotado además en bastiones históricos como La Rioja y Jujuy (ambas en el noroeste).

La mayoría de los partidos presentó este domingo lista única para las parlamentarias de octubre, salvo algunos que libraron una contienda entre precandidatos.

Más del 70% del padrón acudió a las urnas este domingo, incluidos por primera vez jóvenes de entre 16 y 18 años, unos 600.000 electores habilitados.

Las formaciones deben lograr un mínimo del 1,5% de los votos para poder participar en las elecciones parlamentarias que se celebrarán en dos meses.

Las primarias abiertas, impuestas por ley en 2009, se celebran por segunda vez en Argentina pero, aunque fueron creadas para elegir candidatos, en esta ocasión la mayoría de las fuerzas políticas presentan listas únicas.

Unos 90.000 efectivos de las fuerzas de seguridad provinciales y federales se encargan de custodiar la jornada.