El dueño del fundo en el Alto Bío Bío, donde la semana pasada se registró un ataque a un retén de carabineros, dijo que entendía la frustración de la comunidad mapuche del lugar porque el gobierno sólo les hace promesas.

Pablo Salvadores dijo que está dispuesto a vender sus campos y denunció que carabineros usurpó el terreno donde se instaló, sin su permiso.

El empresario señaló que hay cosas que no entiende, porque hace 13 años las autoridades de gobierno le han prometido a la comunidad Malla Malla comprar los lotes 11 y 7 del ex fundo Queuco, que en total suman más de 4 mil 500 hectáreas. De las mejores que hay en Alto Bío Bío, dijo Pablo Salvadores, ya que tienen uso forestal, agrícola, ganadero y turístico, con más de 20 fuentes de agua propias.

Salvadores sostuvo que el gobierno en abril del año pasado se comprometió a comprar los predios y así se lo hizo saber a la comunidad indígena y a él. Además recordó que el director nacional de la Conadi, Jorge Retamal, tuvo en una reunión un comportamiento poco normal.

Al referirse al ataque que se produjo la semana pasada, el empresario señaló que entendía la frustración de la comunidad ante las promesas incumplidas y al referirse a la compleja situación que se vive en el Alto Bío Bío dio a conocer que carabineros se tomó un terreno privado para construir el retén.

Pablo Salvadores también llamó a las autoridades del Bío Bío, al intendente Víctor Lobos y al director de la Conadi, Julio Anativia, a hablar con la verdad y recurrir a los organismos pertinentes antes de dar declaraciones desde la ignorancia y así sembrar dudas sobre la legitimidad en la inscripción de los terrenos.

El empresario insistió en que está dispuesto a vender y dijo que no entendía porqué la Conadi dilata la solución al problema.