Economistas, automovilistas, gremios de taxicolectivos y panaderos analizaron el alza histórica de las bencinas. Aseguraron que ni el pan ni el pasaje subirá de precio, mientras que los usuarios lamentaron el alza.
Renato Segura, economista y director de Ingeniería Civil Industrial de la Universidad San Sebastián de Concepción, coincidió con el Ministerio en que el alza en los combustibles se debe a la dependencia de los chilenos en este mercado. Y es que hay que buscar alternativas, dijo Segura, en apoyo al proyecto gasífero Octopus.
Marcos Maureira, presidente de la Asociación Gremial de Conductores Profesionales de Taxicolectivos de la Provincia de Concepción, insistió en que el problema está en la distribución de los recursos a la hora de paliar alzas como estas, donde los conductores de los vehículos no reciben ni un peso de los bonos del gobierno, situación que llevarán a instancias judiciales.
Que los precios suban, es casi inevitable. El transporte de alimentos y otros servios se ve directamente afectado con cada alza nueva en los combustibles, ¿pero qué opinan los consumidores al respecto? Y es que las pensiones no suben, reclamaron.
Precisamente sobre este último punto se refirió Marcelo Soto-Aguilar, presidente de la Asociación de Industriales Panaderos de Concepción.
En septiembre podrían bajar las bencinas, dijo el ministro de Economía, pero recién está comenzando agosto, por lo que quedan varios días más para recibir malas noticias sobre nuevas alzas en el precio de los combustibles.
