Luego de los hechos de violencia ocurridos durante las últimas tomas de la Universidad Católica de Valparaíso, en donde algunos estudiantes denunciaron abuso de fuerza excesiva por parte de carabineros, el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad, Sebastián Vicencio, realizó un emplazamiento al Obispo de la ciudad para que entregue su visión del conflicto, además de un mayor apoyo a los alumnos agredidos por la policía.
Ante esto el Obispo porteño señaló que nadie lo ha emplazado y que él sí recibió un llamado desde la Universidad donde se le solicitó para una entrevista urgente con los estudiantes, a lo que respondió que una vez normalizada la vida universitaria no tendría inconvenientes en reunirse con los alumnos.
Además, el religioso manifestó su opinión sobre la violencia, señalando que las tomas constituyen un hecho negativo que no avala, dando a conocer también su preocupación por los alumnos extranjeros de la casa de estudios, que en tiempos de tomas no pueden terminar sus ramos.
El obispo señaló que en el último conflicto, cerca de 600 alumnos dejaron la Universidad Católica para continuar sus estudios en entidades privadas, lo que hoy por hoy constituye una gran preocupación dentro de la PUCV.
