El técnico del Manchester United, David Moyes, dio a entender que su club estaba en negociaciones avanzadas para la llegada del centrocampista español del Barcelona Cesc Fábregas, y reiteró este viernes en Sídney que el punta Wayne Rooney, pretendido por Chelsea, se queda en Old Trafford.

El vigente campeón de Inglaterra habría ofrecido unos 30 millones de euros al Barça para hacerse con los servicios de Fábregas, según la prensa británica, aunque esta primera propuesta habría sido rechazada por la dirigencia azulgrana.

“Estoy contento con el director general que se ocupa de eso y espero saber un poco más dentro de uno o dos días”, declaró Moyes en Sídney, donde su equipo enfrenta el sábado al combinado de las estrellas de la Liga australiana, en el marco de la gira de pretemporada de los Diablos Rojos.

El director ejecutivo del club, Ed Woodward, había abandonado la gira de pretemporada que comenzó en Tailandia, donde el MU cayó 1-0 ante el combinado de astros tailandeses, antes de lo planeado afirmando que debía marcharse “de forma urgente por una negociación de una transferencia”.

Evidentemente, el nombre del jugador sería Fábregas, quien conoce como la palma de su mano la Premier League por haber brillado en el Arsenal de 2003 a 2011, antes de regresar al Barcelona, donde se había formado.

El entrenador escocés, sucesor de Alex Ferguson, quien se retiró tras 27 años y 38 títulos con los Red Devils, reiteró que el atacante internacional inglés Wayne Rooney no esta en venta.

“La posición del club no cambia con respecto a Wayne Rooney. Además, trabajamos duro para agregar nuevos elementos al equipo y esperamos tener buenas noticias en un futuro cercano”, dijo Moyes, haciendo referencia a las negociaciones del MU con el Barça por Cesc.

Manchester United rechazó una oferta formal del Chelsea, confirmada por los Blues, por el expunta del Everton, a quien el entrenador Jose Mourinho llenó de elogios intentando convencerlo para que se una a Stamford Bridge.

El futuro de Rooney en Old Trafford genera numerosas especulaciones desde mayo, fecha en la que Sir Alex Ferguson había revelado que el goleador le pidió ser transferido a otro club para cambiar de aire.

Encima, el martes pasado Rooney se mostró “enojado y confundido” tras los comentarios poco claros de Moyes según los cuales usaría al ícono del MU como suplente del artillero internacional holandés Robbie Van Persie.