Pese al triunfo nacional del gremialismo en las primarias de la Alianza, el hecho que Allamand venciera en la región del Bío Bío acrecentó los problemas internos en la UDI. Jacqueline van Rysselberghe, responsabilizó de la derrota a las divisiones internas de su sectoe.

Un millón 621 mil votantes registraba el padrón electoral en la Octava Región y de ellos sólo un 5,6% acudió a las urnas y optó por el oficialismo.

Minutos posteriores al triunfo nacional de Pablo Longueira, los adherentes gremialistas en la zona celebraron, aunque con un cierto gusto amargo.

Lo anterior, porque a pesar del despligue de la campaña, el 54% de estos sufrafios se inclinó por Andrés Allamand, que tuvo una campaña derechamente débil en la región.

Y es que ese punto negro lo dejó en evidencia la misma UDI con una de sus figuras emblemáticas, Jacqueline van Rysselberghe, quien furiosa evidenció el escenario.

La ex alcaldesa culpó a la directiva regional de su partido encabezada por el diputado Iván Norambuena y el diputado Jorge Ulloa de divisiones. Muestro de esto, es que hubo celebraciones en sedes distintas, distanciadas por dos cuadras en el centro penquista.

Por otro lado, el diputado Jorge Ulloa, hizo ver el triunfo y dejó el análisis por territorios para los días venideros. Además, tuvo palabras para lo que viene de cara a las elecciones con Michelle Bachelet.

La pugna entre Renovación Nacional y la UDI quedará para el análisis territorial de los distritos y circunscripciones de la región. Sin embargo, el apoyo cruzado no está en juego según lo comentó Rodrigo Anabalón, secretario regional de RN, que expuso eso sí diferencias con el gremialismo.

Vale decir, que 41 mil 512 votos obtuvo Longueira en el Bío Bío; 48 mil 843 Allamand, con un total de 90 mil 355 votantes que se inclinaron por el oficialismo.