El Consejo de Seguridad de la ONU decidió el jueves por unanimidad aliviar las sanciones que pesaban sobre Irak desde su invasión a Kuwait en 1990, debido a la mejora de las relaciones entre los dos países.

Los 15 miembros del Consejo levantaron la amenaza de sanciones o de uso de la fuerza que pesaba sobre Bagdad por la invasión de las fuerzas de Sadam Hussein, durante la cual desaparecieron unos 600 ciudadanos de Kuwait y archivos nacionales.

El ministro de Relaciones Exteriores iraquí, Hoshyar Zebari, calificó al voto como un “hito” en los esfuerzos de Irak y Kuwait para curar las heridas causadas por la invasión, que terminó tras la acción de una coalición internacional en 1991.

Por otra parte, la votación dio un gran impulso a los esfuerzos de Irak para restablecer su prestigio a nivel internacional luego del derrocamiento del dictador en 2003 tras la invasión liderada por Estados Unidos.

Bajo la resolución 2107, cuestiones humanitarias pendientes entre Irak y Kuwait -personas y bienes desaparecidos- serán manejadas ahora bajo el Capítulo VI de la Carta de Naciones Unidas, que llama a una resolución pacífica de las disputas.

Previamente, estos asuntos habían sido tratados bajo el Capítulo VII de la carta, que permite la imposición de sanciones y la intervención militar para hacer cumplir las demandas del Consejo.

Sin embargo, Naciones Unidas aún tiene impuesto un embargo de armas contra Irak bajo el Capítulo VII de la carta, y continúa existiendo una amenaza de sanciones por el pago de Irak de una indemnización de guerra a Kuwait.

A Irak se le había ordenado pagar más de 52.000 millones de dólares a su vecino. El país sostiene que todavía debe unos 11.000 millones y que la deuda se saldará en 2015.

La resolución reconoce “la importancia de que Irak alcance el mismo nivel internacional” que tenía antes de la invasión de 1990 y dio la bienvenida a la demostración del país “de su compromiso con la plena implementación de sus obligaciones pendientes”.

En un informe reciente que recomendaba la reducción de las sanciones, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, dijo que ambos gobiernos han mostrado “habilidad y respeto” en su reciente negociación.