Ocho mujeres y un niño de una misma familia murieron este martes por la explosión de una bomba en la provincia de Kandahar, un bastión talibán en el sur de Afganistán, cuando acudían a una ceremonia de esponsales, anunció un responsable de la policía local.

“Ocho mujeres y un niño murieron por la explosión de una bomba al paso de su vehículo”, declaró Ghorzang Afridi, portavoz de la policía de la provincia de Kandahar.

Otros tres hombres resultaron heridos, entre ellos el conductor, añadió la fuente.

Las bombas de fabricación casera y los atentados suicidas son las armas preferidas de los insurgentes talibanes, que luchan contra el gobierno de Kabul y contra la fuerza internacional de la OTAN en Afganistán (ISAF) desde que fueron expulsados del poder en 2001.