Durante la tercera jornada del juicio oral por el homicidio de Paola Cerda, peritos policiales y foreneses atestiguaron que la joven recibió cerca de 50 heridas cortopunzantes antes de morir. El Ministerio Público está pidiendo 15 años de presidio para la imputada, que hasta ahora ha guardado silencio.

Los hechos se remontan a la noche del 9 de junio de 2011, cuando la víctima, Paola Cerda Barrientos de 41 años, se reunió junto a la imputada de este caso, Verónica Sáez Prieto de 34, y Eduardo Vázquez, médico del consultorio de Puerto Varas. En el encuentro realizado en la casa de la acusada ingirieron bebidas alcohólicas, tras lo cual ambas mujeres se trasladaron al Casino Dreams de la ciudad lacustre.

Sin embargo, de regreso en la casa de la imputada, pasadas las 05:00 horas, tuvo lugar el ataque. El cuerpo de la víctima fue ocultado por Verónica Sáez en un río, en el camino Las Lomas de la localidad de Nueva Braunau, lugar donde fue encontrado 42 días después con decenas de heridas en su cuerpo.

Durante la tercera jornada del juicio oral, la Fiscalía de Puerto Varas, representada por el fiscal Naín Lamas, presentó como prueba el cuchillo con el cual se habría cometido el crimen y algunos testigos, entre ellos el médico legista del Servicio Médico Legal de Puerto Montt, Germán Kuappe, y el jefe de la Brigada de Homicidios de la PDI, Jorge Márquez.

El médico legista señaló a los jueces que, durante la autopsia, en el cuerpo de Paola Cerda se contabilizaron al menos 35 heridas que catalogó como “vitales”, mientras que el comisario de la PDI indicó que las pericias policiales contabilizaron cerca de 50 heridas cortantes y cortopunzantes en diversas partes del cuerpo que terminaron con la vida de la joven.

Al término de esta audiencia, Zulema Barrientos, madre de la víctima, señaló a Radio Bío Bío que como familia están tranquilos pero inquietos por conocer el dictamen de los jueces.

La imputada, Verónica Sáez, quien está confesa del crimen, arriesga hasta 15 años de cárcel por el delito de homicidio calificado, del cual hasta ahora ha guardado silencio.