El futbolista argentino Leo Messi, astro del FC Barcelona, aseguró este miércoles que “nunca hemos cometido infracción alguna” en relación a la querella por fraude fiscal de 4 millones de euros que ha presentado la fiscalía española contra él y su padre.

El argentino, de 25 años, que el martes disputó un partido con su selección ante Ecuador, se mostró sorprendido en un comunicado en su página de Facebook, donde aseguró haber conocido la denuncia a través de la prensa.

La denuncia “nos causa sorpresa porque nunca hemos cometido infracción alguna. Siempre hemos atendido todas nuestras obligaciones tributarias siguiendo los consejos de nuestros asesores fiscales, quienes se encargarán de aclarar esta situación”, señaló el delantero del Barcelona, cuatro veces ganador del Balón de Oro.

El padre de Messi, Jorge Horacio, también denunciado por la fiscalía, aseguró en declaraciones al diario deportivo As que “es todo un error”, añadiendo que “ya hablé con nuestros abogados para que lo solucionen”.

Consultado por AFP, el FC Barcelona prefirió no hacer ningún comentario al respecto.

En la denuncia, firmada por la fiscal Raquel Amado y obtenida por la AFP, se formula una querella contra Messi y su padre “por tres presuntos delitos contra la hacienda pública (…) referidos al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) de los ejercicios 2007, 2008 y 2009″.

Según este texto, Messi “obtuvo importantes ingresos derivados de la cesión a terceros de los derechos de explotación de su propia imagen” en los ejercicios 2006, 2007, 2008 y 2009 que “debía tributar en sus declaraciones correspondientes”.

“Con la finalidad de burlar esa obligada tributación”, dice la fiscal, se ocultaron esos ingresos mediante “la cesión de sus derechos de imagen a sociedades puramente instrumentales radicadas en paraísos fiscales (Belice y Uruguay)” y “formalizando contratos de licencia, agencia o prestación de servicios” con aquellas sociedades y otras ubicadas en el Reino Unido y Suiza.

Así, los ingresos transitaron desde estos países europeos “hasta las sociedades instrumentales domiciliadas en los paraísos fiscales sin someterse prácticamente a tributación alguna y, además, con total opacidad frente a la Hacienda Pública”, apunta la fiscalía.

La cantidad defraudada alcanzaría los 4,16 millones de euros: el importe ascendió a 1,06 millones de euros en 2007, 1,57 millones de euros en 2008 y 1,53 millones en 2009, señala el escrito.

Según la fiscal, esta estrategia fue elaborada por Jorge Messi junto a Rodolfo Schinocca en 2005, cuando el jugador era aún menor de edad, aunque cuando el futbolista alcanzó la mayoría de edad “ratificó con su proceder la iniciativa defraudatoria de su padre”.

Los beneficios obtenidos por sus derechos de imagen incluyen contratos con el mismo Barça, Adidas, Danone, Pepsi-Cola, Telefónica, el Banco Sabadell, Konami y Kuwait Food Company entre otros por los que percibió más de 10,174 millones de euros entre 2007 y 2009.

Aunque el juez todavía debe aceptar a trámite la querella, si siguiera adelante supondría un golpe al prestigio del cuatro veces Balón de Oro, con fama de ser una estrella más humilde que el resto de astros del fútbol y especialmente que su rival del Real Madrid, Cristiano Ronaldo.

Además de su importancia indiscutible en los terrenos de juego, el valor de Messi en el mercado tampoco puede menospreciarse.

Su elevado sueldo más los altos contratos de mercadeo que tiene firmados con diferentes compañías lo sitúan en la posición número 10 de deportistas más ricos según la lista Forbes, con unos beneficios anuales de 21 millones de dólares anuales.