Una mayoría de los estadounidense cree que el programa federal de vigilancia de las comunicaciones en Estados Unidos, conocido la semana pasada, es un medio “aceptable” de investigar las amenazas “terroristas”, pese a las violaciones a la privacidad, reveló un estudio.

Un 56% de las personas interrogadas aprueban el monitoreo de las comunicaciones telefónicas de los ciudadanos, frente a un 41% de los encuestados que consideran que esta práctica es “inaceptable”, según una investigación realizada por el diario The Washington-Post en conjunto con la consultora Pew.

Un 62% de los estadounidenses creen que es importante que el gobierno federal investigue posibles amenazas terroristas, pese a la vulneración de la vida privada. En tanto un tercio de los encuestados no están de acuerdo con esta política.

Un 45% de los encuestados piensan que el gobierno podría hacer aún más para controlar las actividades online de los ciudadanos. En tanto un 52% piensan que una vigilancia de este tipo no es aceptable.

The Washington Post y The Guardian revelaron la semana pasada los programas secretos de rastreo de las telecomunicaciones, llevados a cabo por Agencia Nacional de Seguridad (NSA).

Por su parte, el presidente estadounidense, Barack Obama, defendió estas prácticas, por su rol en la seguridad ciudadana.

Este sondeo fue realizado por teléfono entre el 6 y el 9 de junio, a una muestra de 1.004 estadounidenses, con un margen de error de cerca del 5%.