La mañana de este martes las autoridades de Sinaloa, estado del noroeste de México, encontraron la cabeza de un asesor jurídico de la policía y la de un exagente de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI) en una hielera, informaron este martes fuentes oficiales que atribuyen los hechos a narcotraficantes

Las cabezas fueron halladas en la ciudad de Los Mochis, al interior de “bolsas de plástico, dentro de dos hieleras”, informó la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del municipio de Ahome, a unos 200 kilómetros al norte de Culiacán, capital de Sinaloa.

La autoridad precisó que aunque el resto de los cadáveres no fueron encontrados, “tenemos confirmado que se trata de estas dos personas: Luis Alonso Ruiz Félix, del área jurídica de la Policía Ministerial, y el exagente de la AFI, Uvaldo Cervantes Juárez”.

Las hieleras estaban en plena calle de una vieja zona industrial conocida como “La Clayton”, donde “fue encontrado un mensaje dirigido a Jesús Carrasco Ruiz, secretario de Seguridad Pública de Ahome”, agregó la SSP, que se negó a revelar el contenido del mensaje.

Una fuente de la Fiscalía Estatal aseguró a la AFP, bajo el anonimato, que el doble homicidio fue atribuido al cartel narcotraficante de los Beltrán Leyva, máximo enemigo del cartel de Sinaloa, liderado por el capo Joaquín “El Chapo” Guzmán.

La misma fuente reveló que el mensaje hallado en el lugar del crimen señala que las dos víctimas proporcionaron información a la policía para que su personal extorsionara y matara a miembros del cartel de los Beltrán Leyva.

La ciudad de Sinaloa, junto con sus vecinos Chihuahua y Durango, forman el llamado Triángulo Dorado, un lugar donde proliferan los cultivos de amapola y marihuana y es considerado el feudo del cartel Sinaloa.

En el primer cuatrimestre de gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto, quien asumió el mando en diciembre de 2012, 5.296 personas perdieron la vida en hechos relacionadas al crimen organizado, según cifras oficiales.

En tanto, durante el mandato del ex presidente Felipe Calderón (2006-2012) ese número ascendió a más de 70.000 víctimas.