Las patronales agrarias de Argentina, gran exportador mundial de alimentos, anunciaron este martes un cese por cinco días en la compra y venta de productos rurales, principalmente granos, a partir del sábado, según informaron dirigentes del sector que protestan contra la política tributaria del gobierno.

La detención de la comercialización de productos rurales no perecederos comenzará la medianoche del sábado 15 de junio y se prolongará hasta la medianoche del miércoles 19 de junio, según señaló Rubén Ferreno, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA).

El impacto concreto de la paralización se sentirá recién la semana siguiente, dado que al finalizar la protesta no habrá actividad comercial debido a que el jueves 20 y el viernes 21 de junio son feriados en Argentina, y luego vendrá el fin de semana.

Los agricultores anticiparon que permanecerán en las carreteras, aunque sin cortar el tránsito, para entregar volantes a los automovilistas y explicar los motivos de la medida de fuerza.

Los productores agrarios de Argentina, principal exportador mundial de aceite y harina de soja y tercero de maíz, mantienen una larga disputa con el gobierno por los impuestos a las ventas al exterior de granos y las restricciones a las exportaciones de trigo y maíz.

El gobierno aplica un impuesto del 35% a las exportaciones de soja, el principal cultivo del país, y sólo autoriza la venta al exterior del trigo y maíz que exceda las necesidades del mercado local.

En 2008 las patronales agrarias mantuvieron una huelga de 128 días que puso inestable al país, provocó desabastecimiento, derrumbó la popularidad del Gobierno e hizo fracasar en el Congreso un proyecto de impuestos móviles a las exportaciones de granos.