El partido entre Vélez y All Boys, válido por la antepenúltima fecha del fútbol argentino se vio interrumpido la noche del sábado debido a incidentes entre las hinchadas de ambos equipos en las tribunas y los aledaños del estadio “José Amalfitani” de Buenos Aires.

Según declaró a la TV Pública el árbitro del cotejo, Pablo Díaz, los incidentes se provocaron en el exterior del estadio, donde hinchas de All Boys intentaron ingresar al estadio José Amalfitani y la policía intentó evitar su ingreso de manera violenta.

Aquella actitud enfureció a los visitantes, quienes se lanzaron a protestar contra las fuerzas de seguridad y rompieron el alambrado del recinto bonaerense.

Tras aquel primer episodio, un grupo de seguidores de Vélez Sarsfield salió a enfrentarse a los barristas visitantes, por lo que la policía debió utilizar gases lacrimógenos para dispersar a los grupos. El humo llegó al campo, lo que provocó la falta de garantías para la continuidad del encuentro, que estaba sin goles tras 26 minutos.