Salvador Cabañas, ex ídolo de la selección paraguaya, del Audax Italiano de Chile, del Jaguares y el América de México, no ceja en su empeño de jugar al fútbol a pesar del proyectil de arma de fuego que tiene incrustado en la cabeza, cerca de la nuca.

El “Mariscal” como lo llaman sus admiradores de Paraguay, con 32 años, forma parte del plantel principal del club Caballero de segunda división, segundo en la tabla de posiciones y que ambiciona escalar a primera para 2014.

Desde el sonado incidente en el baño de aquel pub (Bar-Bar) de Ciudad de México que le cortó su carrera deportiva el 25 de enero de 2010, Cabañas volvió a las canchas en enero de 2012 en su club de origen, el 12 de Octubre, también de segunda división, en las afueras de Asunción.

Con la esperanza de recuperarlo del todo, el entrenador de su actual club, Juan Manuel Battaglia, ex ídolo del América de Cali (Colombia), dijo a la AFP que el afamado jugador “mantiene su instinto futbolístico”.

“Estoy agradecido con el técnico y con el club. Mi anhelo es recuperarme totalmente para jugar en el equipo principal y retribuir todas las atenciones que me brindan. Lo que más quiero es salir campeón con General Caballero”, señaló Cabañas a la agencia AFP.

Y lo que todo el mundo pregunta, ¿será posible extraer la bala en algún momento sin riesgo de vida?

El “Chava” como lo conocen popularmente en México responde sin cortapisas: “Los doctores me dijeron que es muy riesgoso sacar la bala de ahí. Me dijeron que es mejor que no se toque. Yo estoy tranquilo. No tengo ningún problema en jugar con ese proyectil en la cabeza. Ya no quiero mirar atrás. Lo que más me importa es que me tengan en cuenta en el equipo”.

Preguntado si el cuerpo extraño no le generaba molestias en algún momento del día, responde: “Para nada. Llevo una vida normal”.

Enseguida empalma una opinión sobre Paraguay, que debe jugar ante Chile el viernes, en un partido clave para mantener sus chances de clasificación. “Yo confío en los muchachos. Ojalá que den todo de sí en la cancha. Les doy todo mi apoyo”.

Interrogado si piensa volver alguna vez al combinado dijo que ya no se ilusiona. “Es difícil que vuelva. Ya pasó. Mi meta es jugar con mi actual equipo. En eso estoy”.