La justicia deberá aclarar el falso secuestro registrado en la embajada de Israel en noviembre pasado y que llevó a una jueza de garantía aprobar varias diligencias, entre ellas, interceptaciones telefónicas a la esposa del jefe de seguridad de la legación. En el Ministerio Público insistieron que el tribunal estaba informado que se trataba de un simulacro, del que además estaban al tanto las jefaturas de Carabineros.

La Corte de Apelaciones de Santiago abrió un sumario tras enterarse que la Fiscalía Oriente, en coordinación con la embajada de Israel en nuestro país y Carabineros, realizó un “simulacro de secuestro” que involucró a una jueza.

Se trata de la magistrada Carolina Canales, del cuarto juzgado de garantía de Santiago, quien dictó las medidas intrusivas el 28 de noviembre del año pasado a petición del fiscal de la zona oriente Anatole Larrabeiti.

Primero vía telefónica y luego por correo electrónico, al que tuvo acceso exclusivo Radio Bío Bío, el fiscal describe que “GITIT HADASHI, cónyuge del jefe de seguridad de la Embajada Israelita, fue vista por última vez saliendo del colegio Mai Monedes, en la comuna de Lo Barnechea (…) Se presume un secuestro respecto de esta dada su calidad de Agente diplomático y el cargo de alta seguridad de su cónyuge. Se ha llamado reiteradamente a su celular y si bien aparece encendido no responde llamada alguna”.

En este mensaje nunca se informa que la situación se trataba de un simulacro, lo que hace llevar a la jueza Canales dictar las diligencias que pidió el fiscal como interceptar los teléfonos de la supuesta víctima, de su marido, de la asesora del hogar de la pareja e intervenir su tarjeta de crédito.

En un informe que hicieron llegar el fiscal nacional Sabas Chahuán, el fiscal oriente Alberto Ayala y el fiscal Larrabeitu al tribunal de alzada se insiste que vía telefónica, la jueza fue advertida un día antes que se trataba de un simulacro, solicitado por la legación para “medir los tiempos de reacción”.

Sin embargo, en los correos la situación del falso secuestro quedó establecida el 24 de enero de este año. El mensaje está firmado por Pamela Cisternas, administradora de la unidad de Flagrancias de la Fiscalía Oriente, donde se pide eliminar el proceso (RIT), porque se trataba de un simulacro en conjunto con la embajada y el poder judicial.

El pleno de la Corte de Apelaciones se enteró de la situación por la presidenta del cuarto juzgado de garantía, Andrea Osorio.

Ayala, en conversación con Radio Bío-Bío, descartó que se hayan hecho efectivas las medidas intrusivas, es decir, no se efectuaron interceptaciones telefónicas e insistió que la jueza fue advertida.

Posteriormente se conoció de un mensaje de agradecimiento de la embajada de Israel por el simulacro, donde envían sus saludos a funcionarios de Carabineros y la Fiscalía Oriente, pero no al tribunal.

El fiscal regional además reconoció que es primera vez que se realiza un ejercicio como éste.

Mauricio Daza, quien en su oportunidad denunció interceptaciones telefónicas irregulares en el Caso Bombas, pidió que se cree una instancia para fiscalizar a los fiscales.

La decisión de abrir un sumario para investigar estos hechos se tomó por amplia mayoría en el pleno de la Corte de Apelaciones, donde de sus 26 integrantes, sólo tres ministros se opusieron a la indagatoria administrativa, Juan Cristobal Mera, Alejandro Madrid y Hugo Llanos.