“Es fantástico que tras una larga temporada tantas estrellas internacionales hayan venido”, declaró Michael Ballack, de 36 años, tras un partido de despedida lleno de emoción, este miércoles en Leipzig.

“Fue fantástico pese a momentos difíciles. Fue una muy bella carrera”, añadió el excapitán de la Mannschaft ante unos 50.000 espectadores que se acercaron a decirle “Ciao Capitano”, el lema del homenaje en referencia al apodo del jugador.

El goleador marfileño Didier Drogba y el técnico José Mourinho, con los que coincidió en su estancia en el Chelsea (2006 a 2010), así como jóvenes como Andre Schürrle, con el que compartió su última temporada en el Bayer Leverkusen, figuraban entre los invitados.

“Fue un jugador fantástico para el Chelsea y para Alemania. Le deseo desde el fondo de mi corazón que sea feliz”, declaró Mourinho.

Incluso Joachim Löw estaba presente en las tribunas, el seleccionador con el que el jugador de 98 partidos internacionales tuvo momentos difíciles al final de su carrera.

Ballack, con su habitual número 13, marcó tres goles en la victoria (4-3) del equipo de sus amigos frente a una selección mundial.

El centrocampista formado en el Chemnitzer FC (ex-RDA) ganó cuatro títulos nacionales en Alemania (uno con Kaiserslautern y tres con el Bayern Múnich), además de uno de Inglaterra (con Chelsea en 2010) pero ninguno europeo o mundial.