El presidente del club argentino Independiente, Javier Cantero, cuyo equipo está al borde del descenso, acusó este martes a su archirrival Racing de “cobrar para perder” en un polémico partido contra Quilmes, que también está en peligro de bajar a segunda división.

“Hay algunas cosas de las que no se vuelve, estamos tirando por la borda la esencia del fútbol y eso genera violencia. Eso no es el folclore del fútbol, eso es jugar para atrás, eso es cobrar para perder”, dijo Cantero a radio Continental al aludir al encuentro que Racing perdió el viernes ante Quilmes por 1-0.

Ese partido estuvo rodeado por suspicacias porque los jugadores de Racing no parecían esforzarse demasiado y además el árbitro no mostró ni una sola tarjeta amarilla, algo poco habitual en el fútbol argentino.

Previo a ese partido aparecieron panfletos con la inscripción “Pierdan o ‘se pudre’ (habrá violencia)” en adyacencias del estadio de Racing, en una amenaza de hinchas del equipo al plantel para que se dejase ganar por Quilmes y así perjudicar a Independiente, que lucha por evitar el descenso a segunda división por primera vez en su historia.

“Quiero decir que por no poner una pierna fuerte ya se han manchado instituciones, carreras de futbolistas y de entrenadores. Hablo de las hinchadas que han cantado los goles contrarios y de los equipos que viéndolos en la cancha han deambulado”, señaló Cantero, conocido por encarar casi en solitario una lucha frontal contra los hinchas violentos de su club.

El triunfo de Quilmes ante Racing 1-0 y el empate 0-0 de Estudiantes con Independiente, dejó a este último equipo en zona de abismo, a falta de tres fechas para que concluya el Torneo Final.

Racing e Independiente, cuyos estadios están ubicados a unos 500 metros de distancia en la localidad de Avellaneda (periferia sur de Buenos Aires), son rivales históricos en Argentina, casi al nivel de Boca y River, los clubes más populares del país.

Independiente, considerada por la FIFA como la duodécima mejor institución del mundo en el siglo XX, y Boca Juniors son los dos únicos equipos argentinos que nunca han descendido, a diferencia de los otros ‘grandes’ de este país, San Lorenzo, Racing y River Plate que sí han caído a segunda división.