La policía serbia arrestó el viernes a un australiano que tras un altercado mordió a un empleado de un café, arrancándole una falange, informó el sábado una fuente policial.

La disputa estalló cuando el australiano, de 26 años, entró en una cafetería en Novi Sad (norte) con su propia botella de alcohol, con intenciones de consumirla dentro del recinto.

Tras cartón, el camarero le pidió al hombre que guardara su botella, petición que no causó gracia en el visitante provocando la furia de este último quien mordió la mano del mesero arrancándole una falange.

Tras el incidente, el joven australiano fue detenido acusado de lesiones.