Finalmente fue cerrado el negro capítulo del conflicto entre el municipio de Osorno y los apoderados de 168 estudiantes pertenecientes a las escuelas rurales de Cancha Larga, Pichil y Cancura, debido a que por limitaciones legales reafirmadas por la Contraloría, la entidad edilicia no puede gastar recursos fuera del límite comunal, por lo que se suspendió el transporte escolar para los alumnos que estudiaban fuera de la comuna.
Con la firma de los convenios de colaboración entre los municipio de Osorno, San Pablo, Río Negro y San Juan de la Costa, los buses municipales volvieron a recoger a los niños, con lo que pudieron volver a clases a sus respectivos establecimientos.
Y es que en el caso de las tomadas escuelas de Cancha Larga y Pichil por padres y apoderados de los estudiantes afectados, la medida de presión fue depuesta, la primera el día martes y la segunda el día miércoles.
Con todo, los 168 alumnos ya retornaron a clases, tal como informó Héctor Beltrán, presidente del Centro General de Padres de la escuela de Cancha Larga.
Desde la escuela de Pichil, la presidenta del Centro General de Padres y Apoderados, Carolina Martínez, insistió en que la tarea ahora es lograr que los convenios de colaboración entre los municipios sean renovados cada año, pues no quieren que sus alumnos deban dejar sus escuelas.
En tanto, Héctor Beltrán sostuvo que para el caso de los estudiantes pertenecientes a la escuela de San Pablo, se analizará si se acepta la propuesta del alcalde de la comuna, Omar Alvarado, quien ha ofrecido movilización si es que deciden trasladar a sus hijos a un establecimiento educacional de su comuna.
