Este lunes fue confirmada la audiencia de preparación del juicio oral en contra del ex Director del Colegio Salesiano de Concepción, sacerdote Audyn Araya Alarcón, acusado de abuso sexual contra menores. En este contexto, se denunció que la congregación no aportó ningún antecedente de los solicitados por la parte querellante para el desarrollo de la indagatoria.
Cabe señalar, que Araya será sometido a juicio entre junio y agosto próximo. La audiencia de preparación quedó fijada para el 21 de junio, momento en que serán ventilados los antecedentes de cada una de las partes.
El cura fue director del Colegio Salesiano de Concepción en 2008, fecha a la que se remontan las acusaciones en su contra.
Se trata de 4 adolescentes que denunciaron los presuntos hechos ante la justicia. Tres de ellos persistieron con las acusaciones, pero uno de ellos se suicidió. Pese a esto, su familia continúa aportando antecedentes en la causa.
Los menores fueron sometidos a pericias psicológicas en el Centro de Asistencia a Víctimas de Agresiones Sexuales (Cavas) de Santiago. El organismo de la PDI realizó indagatorias y exámenes a los adolescentes que interpusieron la acusación contra el sacerdote.
El abogado de dos de las víctimas dio cuenta que expondrán las argumentaciones, sin embargo, quedarán al margen todos los antecedentes que pudiera haber entregado la Congregación que se negó a aquello, según comentó el querellante Renato Fuentealba.
La actitud de la Congregación apunta a la existencia de una indagatoria canónica, de la cual no existe información, ni siquiera aportada hacia las mismas víctimas.
El día 14 de octubre de 2012, la misma Congregación Salesiana a través de un comunicado en su portal de Internet confirmaba que el sacerdote Araya Alarcón presentó una crisis psico-depresiva grave.
El diagnóstico médico estableció que había consumido una sobredosis de medicamentos, relataba el texto; intento de suicidio ocurrido previo a una audiencia de revisión de cautelares.
Actualmente, el cura se mantiene con arresto domiciliario total en casa de familiares en Santiago, a la espera del juicio.
