La disidencia de la Democracia Cristiana rechazó que la Comisión de Ética del partido se pronuncie sobre la participación de la militancia en la campaña presidencial de Claudio Orrego.

Un grupo de consejeros pidió que esa instancia establezca estándares mínimos a cumplir por los militantes en apoyo a la campaña del abanderado DC, frente a las críticas por la falta de compromiso con ella que ven en el sector que lideran los diputados Aldo Cornejo y Gabriel Silber, quienes perdieron la última elección interna.

Desde antes de la proclamación de Orrego, ambos han sido partidarios de un respaldo a Bachelet.

El vicepresidente del partido, Fuad Chahín, dijo que esto no es un problema disciplinario, sino ético.

Uno de los apuntados, el diputado Gabriel Silber, estimó que la Comisión de Ética no debe pronunciarse en el tema presidencial. A su parecer, las confianzas o cercanías no pueden imponerse por estatuto.

Según el diputado Silber, falta autocrítica en la DC sobre porqué la candidatura de Orrego no ha logrado la adhesión que concita Bachelet.