Las denuncias del comando de Michelle Bachelet sobre intervencionismo electoral del gobierno, después de que la comitiva de la ex Presidenta enfrentara disturbios en su gira a las zonas afectadas por el tsunami del 27-F, escalaron hasta una acusación formal que será realizada mañana ante la Contraloría General de la República.

Testimonios de pobladores que aseguran haber sido amenazados con perder sus beneficios habitacionales si apoyan a la ex mandataria, e incluso pruebas de que funcionarios municipales habrían organizado contra manifestaciones, serían los antecedentes que el comando de Bachelet entregará a Ramiro Mendoza.

En medio del evento “Contralor por un día”, Mendoza aseguró que aún no conoce en concreto esta evidencia, pero estableció que si se descubre que hubo violación a la probidad, se investigará y precisó que las sanciones consideran incluso una propuesta de destitución de las autoridades.

El jefe de bancada de diputados de la Unión Demócrata Independiente, Gustavo Hasbún, calificó como paranoico el actuar del comando de Bachelet, llegando incluso a calificar a la Concertación como, en sus palabras, “Los reyes del intervencionismo”.

Hasbún recordó que en la campaña presidencial anterior, salieron todos los ministros del gabinete de la entonces presidenta, a decir que no era lo mismo votar por Piñera que votar por Frei.

Desde el comando de la ex mandataria se limitaron a decir que presentarán los antecedentes a los organismos competentes: Los tribunales de justicia en el caso de los rayados contra Bachelet realizados en la Municipalidad de Talcahuano, La Contraloría por la supuesta intervención electoral y también afirmaron que serán recibidos por el ministro del Interior, Andrés Chadwick.