Durante la tarde del lunes se decretó cierre de la investigación de la llamada “Operación Heidi”, caso en el que se habría desbaratado una presunta red de explotación sexual infantil.
En el Séptimo Juzgado de Garantía, tras más de 8 horas de audiencia, el magistrado Patricio Álvarez acogió la solicitud de cierre presentada por el abogado Washington Fernández, defensor de Manuel Lucero, al considerar que no había más diligencias pendientes en la investigación.
El defensor de Lucero, imputado inicialmente por obtención de servicios sexuales reiterados y violación de una menor de 14 años, consideró que la indagatoria del Ministerio Público no consiguió sostener los cargos contra su representado.
A Manuel Lucero, junto a Genaro Fernández, y la regenta Julia López, se les rebajó la medida cautelar de prisión preventiva a arresto domiciliario nocturno, arraigo nacional y prohibición de acercarse a las presuntas víctimas.
Pese a que el fiscal de la Zona Metropolitana Sur, Rodrigo Chinchón, sabía que el cierre de la investigación era un escenario esperable, aseguró que no están de acuerdo con que el Tribunal haya resuelto levantar la cautelar de presidio a todos estos imputados.
Si bien en la audiencia se apeló de forma verbal a la decisión de cierre, el tribunal declaró no admisible el recurso en el caso particular de Lucero, ya que este ya estaba en prisión preventiva, por lo que el persecutor deberá elevar a la Corte de Apelaciones un recurso de hecho dentro de los próximos 5 días.
