El Gobierno trabaja en el retorno de chilenos residentes en España que se encuentran afectados por la crisis económica por la que atraviesa Europa, tras la solicitud de ayuda que realizaron en la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara Baja. Expertos señalaron que ésta es una situación inédita, ya que los protocolos que existen, apuntan a la ayuda que se entrega a chilenos afectados por la guerra y no por contextos económicos.
Son cerca de diez mil los chilenos que se encuentran en España afectados por la grave crisis económica por la que atraviesa el denominado “Viejo Continente”. Situación que motivó la solicitud de ayuda que entregaron familiares en la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados.
Un documento del Tribunal de Cuentas en España publicó las cifras de inmigrantes sin recursos que se quedarían sin Tarjeta Sanitaria, listado en el que aparecen los chilenos en el sexto lugar con 10 mil 668 afectados.
Muchos de ellos partieron hace algunos años en busca de trabajo y hoy, además de estar cesantes, no cuentan con respaldos mínimos en materia de salud y vivienda. Por lo que tampoco pueden regresar al no contar con los recursos económicos.
El analista internacional de Chile 21, Guillermo Holzman, aseguró que ésta es una crisis inédita, ya que los protocolos diplomáticos apuntan a prestar ayuda a chilenos en el extranjero, pero, afectados por la guerra.
Holzman indicó que es es muy difícil que se logre un acuerdo con España para, defender la tarjeta sanitaria, ya que no se puede intervenir en otros gobiernos, menos cuando están enfocados en priorizar la ayuda para los españoles. A juicio del experto, la única opción que queda es la repatriación.
El canciller Alfredo Moreno, aseguró que se está trabajó con un comité de ministros para solucionar la situación de los compatriotas, quienes podrán postular a una serie de beneficios publicados en la página del Ministerio de Relaciones Exteriores, denominada Plan de Retorno.
Estas medidas apuntan no sólo a la repatriación de los chilenos sino también a su adaptación en Chile con situaciones cotidianas como la continuidad escolar de los niños.
