El Examen Único Nacional de Conocimiento de Medicina, Eunacom, es una prueba teórico práctica, aplicada por la Asociación de Facultades de Medicina de Chile, Asofamech, que mide la calidad de los egresados de la carrera de medicina, quienes de aprobarla, pueden ejercer en el sector público.

Prueba que en su origen, en 2003, en la Asociación de Facultades de Medicina de Chile, ASOFAMECH, tenía un objetivo de orientación respecto a las condiciones académicas en que egresaban los estudiantes de esta carrera. Situación modificada en 2009 cuendo se hizo obligatoria y se le agregó una parte teórico.

Sin embargo, a juicio del Ministerio de Salud, este examen no funcionaba como colador ya que los egresados que la reprobaban era un sector mínimo, situación que no se daba por ejemplo en el caso de los extranjeros quienes en un 80 por ciento no lo superaban.

Por lo menos así lo explicó el titular de Salud, Jaime Mañalich, quien dio a conocer los motivos de las medidas.

La decana de medicina de la Universidad de Chile, Cecilia Sepúlveda, aseguró que sin duda esta es una medida apresurada, porque todavía no se conocen los resultados de la investigación en torno a la filtración de 12 preguntas que se denunció el año pasado. Situación que motivó el trabajo de perfeccionamiento de la prueba.

El Presidente del Colegio Médico, Enrrique Paris, rechazó la medida, porque no se tomó en cuenta la opinión de ninguna institución relacionada.

Para el miembro del Movimiento de Médicos por Chile, el ex presidente de la Fech, Julio Sarmiento, la medida del Gobierno coincide con la posición de los estudiantes quienes hace años afimaban que no era una garantía de calidad.

El ex Superinetendente de Salud, Manuel Inostroza, señaló que ésta es una decisión que no esta bien fundamentada y que no está en línea con el avance que se había realizado para implementar mayores estándares de exigencia.

Inostroza agregó que posiblemente al Gobierno se le ha complicado cumplir con los estándares que garanticen calidad tal como ha ocurrido con los hospitales, donde todavía no se aplica la exigencia de acreditación.