Su preocupación manifestó el senador Ricardo Lagos Weber frente a la posibilidad de que la ciudad jardín pueda perder su casino, debido a la nueva normativa que fiscalizará estos establecimientos.

Esto, porque el centro de juegos genera casi la mitad de los ingresos que recibe anualmente la Ciudad Jardín y además, es ícono turístico y parte de la identidad de la zona.

Weber, agregó que si no se quiere abordar el tema de manera definitiva, una forma de acomodar la situación es extender el plazo de funcionamiento desde el 2015 hasta el 2025 o 2030, extendiendo su apoyo a lo planteado por la alcaldesa de Viña del Mar, Virginia Reginato.

El parlamentario lamentó que hoy en día esté en tela de juicio el aporte del casino a los municipios producto de la nueva ley, ya que a pesar de entender que el tema es complejo -porque habrían otros parlamentarios que también quieren casinos en sus ciudades- “se debe entender que este proyecto afecta no sólo al bolsillo de las municipalidades, sino también a su patrimonio intangible”, concluyó.