Uno de los integrantes de la secta de Colliguay que el pasado 23 de noviembre sacrificó a un recién nacido por considerarlo el anticristo fue quien develó la ubicación del cuchillo utilizado en el ritual, el cual se encontró enterrado junto a un árbol a 6 kilómetros del lugar donde se incineró al bebé.

El lugar en donde quedó el arma fue revelado por David Pasten en el marco de las diligencias que este lunes se realizaron en el fundo Los Culenes, por parte de la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (Bipe) de la PDI y la fiscalía de Quilpué.

Según consignó La Segunda, el Laboratorio de Criminalística (Lacrim) de la PDI peritará el arma blanca para determinar si fue utilizada en el crimen.

El subcomisario Héctor Cornejo afirmó que las peritajes se realizaron con el fin de determinar el lugar exacto donde se realizó el sacrificio, realizándose una infografía a fin de establecer la dinámica del ritual de sacrificio del lactante.

Por su parte, el fiscal de Quilpué Carlos Parra no descartó la participación de más personas en el caso, así como la reformalización de los actuales imputados.

Cabe destacar que expertos de Bomberos también comprobaron la presencia de acelerantes en el sector donde se realizó la hoguera.