Ucrania conmemoró este viernes el 27 aniversario de la explosión del reactor número 4 de la central nuclear de Chernobil, donde el montaje de un nuevo sarcófago para recubrir el reactor afectado en 1986 finalizará en 2015.

Antes del amanecer, decenas de personas depositaron flores y velas al pie del monumento a las víctimas de Chernobil en Slavutich, ciudad que se localiza a unos 50 kilómetros de la zona donde ocurrió la explosión y donde vivían muchos de los trabajadores de la planta.

En Kiev, las familias de las víctimas y las autoridades del país participaron en una ceremonia frente a un memorial.

Miles de “liquidadores” habían sido enviados sin protección al lugar del desastre para ayudar a combatir el incendio y enfriar el reactor dañado.

El comité científico de la ONU sobre los efectos de la radiación reconoce apenas la muerte de 31 operadores y bomberos relacionada directamente a la catástrofe, mientras que la ONG Greenpeace estima en 100.000 el número de muertos a causa de la contaminación radioactiva.

“Los recuerdos de la tragedia nos rememoran la necesidad de unirse y consolidar los esfuerzos del gobierno y de la sociedad” para lograr los “proyectos diseñados para crear un ambiente seguro en Chernobil”, dijo el presidente Viktor Yanukovich en un comunicado.

El año pasado, Ucrania empezó obras de montaje de un nuevo sarcófago para reducir la amenaza radioactiva en el lugar del desastre.

Tras la explosión del 26 de abril 1986 en la antigua central nuclear situada a una centena de kilómetros al norte de Kiev, los restos del reactor accidentado fueron recubiertos con una capa de concreto, pero esta instalación, construida de urgencia, presenta fisuras y no puede ser considerada segura.

“El futuro, es una nueva aislación, y es lo que esperamos desde hace años”, declaró ante periodistas el director técnico adjunto de las operaciones de seguridad en la central de Chernobil, que visitó la planta la semana pasada.