El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, realizó este miércoles un acto formal de restitución de tierras a campesinos desplazados, a los que prometió detener la violencia en su contra, un día después de que uno de sus líderes fuese asesinado.

“A las personas que están amenazando, a las personas que están asesinando a los que están reclamando tierra los vamos a considerar objetivos de alto valor”, dijo Santos, tras guardar un minuto de silencio en memoria al dirigente campesino Ever Cordero, asesinado el martes en la zona de Montería (500 kms al norte de Bogotá).

“Necesitamos el apoyo de las comunidades, que los denuncien, que nos ayuden a ubicarlos. Será contundente para que no se pueda detener este paso tan histórico que estamos haciendo de devolverle las tierras a los campesinos”, añadió el mandatario desde la Hacienda Santa Paula, de donde en 1999 el grupo paramilitar de los hermanos Carlos y Fidel Castaño expulsó a los campesinos.

Allí, Santos hizo restitución formal de predios a 60 familias, cada una de las cuales recibió cinco hectáreas de tierra.

La restitución corresponde a una decisión del Tribunal Superior de Antioquia, donde se radicó el juicio debido a las amenazas que había en la zona de Montería.

En el acto, Santos honró también la memoria de la dirigente campesina Yolanda Izquierdo, quien había organizado a la comunidad para presentar el reclamo judicial y fue asesinada en 2007, a los 43 años de edad.

“Vamos a ir detrás de ellos con todo lo que tenemos a nuestro alcance, ofreciendo recompensas altas para que nos den información”, aseguró el presidente al referirse a quienes asesinan a los dirigentes campesinos.

El crimen contra Cordero, el segundo ocurrido en esa región en quince días, fue condenado el martes por tres agencias de Naciones Unidas en Colombia, que expresaron su consternación por la falta de protección eficaz a los líderes de los reclamantes de tierras.

Santos, quien el año pasado emprendió un proceso de paz con la guerrilla comunista Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), promulgó en 2011 una ley de restitución de tierras y reparación a víctimas del conflicto armado, con la que aspira a devolver unos 4 millones de hectáreas a los desplazados por la violencia.

Colombia es uno de los países del mundo con mayor número de desplazados: 3,7 millones de personas, según la oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados.