El Arzobispado de Santiago informó este miércoles acerca del destino de los bienes de la disuelta Unión Sacerdotal del Sagrado Corazón de Jesús, que encabezó el sancionado sacerdote Fernando Karadima, condenado por abusos sexuales.

A través de un comunicado, la entidad religiosa anunció la creación de una Fundación cuyos principales objetivos serán la prevención de abusos sexuales de menores y acoger eventuales víctimas.

Lo anterior, como una forma de “proteger y fortalecer el vínculo pastoral entre sacerdotes y fieles”.

Según se indicó, la entidad estará integrada por profesionales especializados en la prevención y reparación de víctimas de abuso sexual y psicológico. Su directorio, en tanto, estará compuesto por laicos y religiosos competentes en estas materias.

Por otro lado, se aclaró que los bienes inmuebles de la ex Unión Sacerdotal deberán distinguirse de los que pertenecen a la parroquia del Sagrado Corazón, que incluye una casa sacerdotal, la que será destinada a la asistencia de sacerdotes ancianos y enfermos.

Se espera que a partir de julio se concrete esta iniciativa, que fue ordenada por el Arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati.

Recordemos que los bienes de la disuelta organización que encabezó Karadima, pasaron a manos de la Arquidiócesis de Santiago, según lo determinó un dictamen de la Contraloría del 1 de abril de 2013.

La Unión Sacerdotal estuvo compuesta por cerca de 40 sacerdotes, que tenían como “líder espiritual” al suspendido religioso, grupo que sufrió un quiebre interno luego que se conocieran en 2004 las denuncias en contra de Karadima, por abusos sexuales contra menores con violencia y abuso de su potestad eclesiástica.