Este martes se conoció el error en la redacción de la acusación constitucional contra el ministro de Educación, donde se le atribuyeron facultades que corresponden a la cartera de Interior. Sin embargo, el juicio político seguiría su curso con normalidad.

Ni los acusadores ni los defensores se percataron del error en uno de los artículos del documento, donde se le acusa por ejemplo, de no custodiar el orden público. Se especula, que dicha redacción fue copiada de la fracasada acusación contra el ex titular de Interior, Rodrigo Hinzpeter.

Surgen entonces las dudas sobre qué camino tomará el proceso contra el secretario de Estado. La Ley Orgánica Constitucional del Congreso permite que Beyer sea sancionado, pese a que se rechace uno de los artículos del libelo, pues éste no se refiere al fondo de la acusación, que apunta a las facultades del ministro para fiscalizar el lucro en la educación.

Si bien, el error de forma puede ser grave, los senadores -en su calidad de jueces- pueden tomar incluso sólo un capítulo para proceder a destituir a Beyer de su cargo, pues se vota cada uno por separado, según indica el artículo 51 de la ley 18.918.

Luego que la Cámara de Diputados acogiera la acusación, sin reparar en error alguno, el ministro quedó suspendido de sus funciones. Luego, se presentaron los cargos al Senado, el que este martes da cuenta del ingreso del documento y debe fijar una fecha para que sea expuesto por tres diputados designados para ello, lo que se estima suceda a inicios de la próxima semana.

Desde entonces, se realizarán sesiones diarias con la presencia de Harald Beyer hasta que pronuncie su decisión. El acusado podrá defenderse, los diputados acusadores podrán replicar y luego escuchar la dúplica del ministro. Tras ello se fijará una sesión especial para votar por separado los artículos e informar la decisión final al acusado, a la Cámara de Diputados y al Presidente de la República.