Un guardia “entrenado y armado” en cada escuela es la solución para mejorar la seguridad de los alumnos, afirmó este martes la poderosa Asociación Nacional del Rifle (NRA) durante la presentación de sus recomendaciones prometidas tras la masacre de la escuela de Newtown.

La “presencia de un agente de seguridad armado aportaría un plus de seguridad a las escuelas (…) pero la decisión debe tomarse localmente”, afirmó durante una conferencia de prensa en Washington Asa Hutchinson, responsable del programa National School Shield (“Escudo nacional para las escuelas”).

La formulación de este programa, destinado a proponer medidas para aumentar la seguridad en las escuelas estadounidenses, es la respuesta de la NRA al tiroteo de Newtown, Connecticut (noreste), durante el cual murieron 20 escolares el 14 de diciembre.

“La única manera de detener a un malvado armado es con una persona de bien armada”, había señalado el vicepresidente ejecutivo de la asociación, Wayne Lapierre, a los pocos días de la masacre.

El informe de 225 páginas presentado a los periodistas el martes se articula en torno a ocho recomendaciones, que van desde aspectos muy técnicos sobre las cerraduras de las puertas de entrada y el cierre de los establecimientos, hasta la puesta en vigor de un programa de entrenamiento de 40 a 60 horas para todo el personal voluntario y todas las escuelas que pretendan poner agentes de seguridad armados en su recinto.

Se dirige asimismo a los legisladores de los estados para que propongan modificar la legislación en vigor con el fin de permitir tener agentes armados en las escuelas.

La NRA se opone con todas sus fuerzas a cualquier intento legal de restringir el acceso a las armas en un país en el que el derecho a poseer un arma está garantizado por la Constitución.