El bioetanol, un valioso compuesto químico utilizado con fines energéticos debido a su utilidad como combustible, podría ser obtenido a través del tratamiento de verduras en mal estado.

Así lo concluyeron investigadores españoles y argentinos, quienes desarrollaron un método para el tratamiento y posterior conversión de cerca de 84 mil toneladas de zanahorias desechadas por faltar a los estándares de consumo.

“Cualquier producto que posea hidratos de carbono, ya sean simples o complejos, puede convertirse en etanol por fermentación alcohólica”, señaló María Rojas, responsable del proyecto, recoge el periódico ibérico El Mundo.

El bioetanol se ha alzado como un combustible alternativo en la industria automotriz, posicionándose como una opción sustentable y no contaminante. Actualmente los países que lo producen en mayor cantidad son Estados Unidos y Brasil.

Con esta iniciativa, que se materializaría con la instalación de una planta de tratamiento en Santa Fe, Argentina, se espera que ambas naciones potencien el uso del bioetanol como impulsor de la producción.