El gobierno iraquí decidió este martes aplazar “seis meses como máximo” las elecciones provinciales del 20 de abril en las provincias de mayoría sunita de Al Anbar y Nínive debido a la situación de inseguridad reinante en ellas, anunció el portavoz del primer ministro.

Un miembro de la comisión electoral había afirmado inicialmente que el aplazamiento afectaba a 14 de las 18 provincias iraquíes en las que debían celebrarse los comicios.

Pero, contactado por la AFP, Alí Musaui, portavoz de Nuri al Maliki, explicó que esta medida se aplicará sólo a las provincias de Al Anbar, en el oeste del país, y de Nínive, en el norte.

Destacó la situación de inseguridad que impera en estas regiones. “Muchos candidatos fueron amenazados, y a otros los mataron”, aseguró.

Al Anbar y Nínive, cuya capital provincial es Mosul, fueron escenario en las últimas semanas de manifestaciones de la comunidad sunita que se considera “marginada” por el gobierno del chiita Nuri al Maliki.

En general, Irak, en la víspera del décimo aniversario de su invasión por tropas encabezadas por Estados Unidos, sigue sufriendo ataques prácticamente a diario.

Este martes por la mañana hubo varios atentados contra la comunidad chiita, mayoritaria en el país, sobre todo en Bagdad y en sus alrededores. Al menos 50 personas perdieron la vida en ellos.