El líder checheno Ramzan Kadyrov reconoció este lunes haber utilizado el micrófono del estadio para insultar al árbitro durante un partido que su equipo, el Terek Grozny, disputó en su campo el domingo.

“El árbitro es un corrupto… ¡Usted es un cretino!”, gritó Kadyrov, que preside desde febrero de 2007 la pequeña república del Cáucaso, perteneciente a la Federación Rusa, cuando el árbitro Mikhail Vilkov expulsó al capitán del Terek, Rizvan Utsiyev, durante el partido contra el Rubin Kazan (0-0) del campeonato ruso.

“Sí, fui yo. Ramzan Kadyrov”, reconoció este lunes a la agencia de prensa RIA Novosti acerca de su aparición por los altavoces del estadio, que provocó los aplausos del público y el asombro de los comentaristas de la televisión.

“Tenía buenas razones para hacerlo. Mis quejas contra el árbitro no se producen sólo por el partido de ayer. Sus decisiones merecen una investigación meticulosa. No podemos permitir que un solo hombre arruine todo el partido”, explicó Kadyrov.

“Pido disculpas a todo el mundo del fútbol porque hice esto en un momento de furia. Pero no al árbitro, que merece ser tratado como un corrupto”, había escrito el domingo en su cuenta de la red social Instagram Kadyrov, que en el sitio de internet del club checheno se le presenta como el presidente de la entidad.

El hombre fuerte de Chechenia, que recientemente recibió al actor francés Gerard Depardieu y le ofreció una vivienda en Grozny, gobierna el país con un estilo paternalista.

Habitualmente se mueve con una escolta de multitud de coches y rara vez viste de traje y corbata. Sus excesos han sido denunciados por organizaciones de defensa de los derechos del hombre.

Por este incidente su club se enfrenta a una multa o a una suspensión según lo que decida la Federación Rusa de Fútbol.